El virus SARS-CoV-2, causante de la actual pandemia Covid-19, pertenece a la familia de los coronavirus. Los coronavirus son virus envueltos con un genoma de ARN positivo y una nucleocápside helicoidalmente simétrica, también conocida como ribonucleocápside (RNP). La proteína de la nucleocápside o proteína N o ribonucleoproteína es la proteína más abundante en los coronavirus. Esta proteína de 50 kDa codificada por el gen ORF9b es una fosfoproteína altamente inmunogénica que también interviene en la replicación del genoma viral y en la modulación de las vías de señalización celular. Durante el ensamblaje del virión, la proteína N se une al ARN viral y conduce a la formación de la nucleocápside helicoidal. Debido a la conservación de la secuencia de la proteína N y a su elevada inmunogenicidad, la proteína de la nucleocápside del coronavirus es elegida como herramienta de diagnóstico o como diana potencial para el desarrollo de nuevas vacunas.